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EXPERIENCIA CREATIVA Y PROCESO DE DESARROLLO ARTISTICO EN EL CENTRO FEMENIL DE READAPTACIÓN SOCIAL DE TEPEPAN

  • Artículos
  • N° 6
  • Salud Mental

Dr. Rodrigo Delgado Saltijeral, doctor en Artes y Diseño egresado de la UNAM, su tema de investigación ha sido sobre el trabajo con lenguajes artísticos en cárceles y hospitales psiquiátricos en México

“Usted sabe, cuando uno está en la cárcel, uno se siente muy solo […] Es un vacío que uno siente en el corazón y ahí se queda […] Uno se siente muerto en vida […]

                                                                                                                              Interna anónima

Las mujeres internas en el dormitorio 8 del Centro Femenil de Readaptación Social (CEFERESO) “Tepepan”[1] en la Ciudad de México viven en una situación de aislamiento y segregación socio-cultural que forma parte del contexto de discriminación y pobreza profundamente arraigado en México. Elena Azaola señala al respecto: “Para entender el problema de la educación de las reclusas resulta indispensable la conciencia y la aceptación de que las mujeres presas pertenecen a un grupo específico de nuestra estratificación social. Se trata de clases subalternas, entre las que encontramos grupos marginados constituidos por trabajadoras temporales, empleadas domésticas, comerciantes a pequeña escala, prostitutas, etc.”.[2] El CEFERESO “Tepepan” forma parte de los 418 centros de reclusión del país y es uno de los 10 exclusivos para mujeres reclusas. Hasta 2013 la población femenil interna en centros de reclusión era de 11,901, representando al 4.87% de la población total recluida. Del total de mujeres recluidas 4,189 se encuentran en los centros exclusivos para mujeres y 7.712 en centros mixtos, [3]dos de los 10 centros exclusivos para mujeres se encuentran en la Ciudad de México. Uno de estos diez centros es el de Tepepan cuya población aproximada es de 221 internas[4], aquí se encuentran las reclusas sentenciadas y un grupo minoritario diagnosticado con alguna enfermedad o trastorno mental que ocupa el dormitorio 8, la mayoría son mujeres diagnosticadas con trastornos mentales crónicos, algunas de ellas están recién ingresadas al centro y se encuentran en proceso de diagnóstico y tratamiento médico. El aislamiento del resto de la población es la principal evidencia de discriminación que se puede percibir; además la falta de acceso a las áreas deportivas, educativas y culturales las induce a la soledad y el abandono.

Como parte de nuestro trabajo de investigación en las instituciones de salud mental de la Ciudad de México utilizando lenguajes artísticos como medio de intervención, hemos realizado una serie de diez talleres con un grupo de aproximadamente 20 mujeres internas en el dormitorio 8 de este centro penitenciario; esta experiencia de intervención nos ha aportado nuevas y variadas perspectivas vistas de nuestra investigación. Estos nuevos enfoques se basan en una serie de elementos que pudimos observar a lo largo del desarrollo de esta serie de talleres. La alta vulnerabilidad que caracteriza a esta población, marcada por múltiples factores como son la discriminación de género[5], la pobreza, el alcoholismo, la drogadicción, el abandono y la enfermedad mental las convierte en una presa fácil de la desolación y la tristeza.

Una de nuestras principales aportaciones como facilitadores en el espacio de intervención dentro de este espacio, es el poder interferir y bloquear mediante el uso de lenguajes artísticos, el constante deterioro psicológico y emocional al que están sometidas estas mujeres. La elección de los lenguajes artísticos adecuados a la situación de vulnerabilidad de esta población tiene que contemplar una serie de elementos que per se, forman parte de los problemas que se encuentran en las instituciones de salud mental y que en el contexto penitenciario llegan a tener múltiples variaciones.

Nuestro trabajo de intervención en otros tipos de instituciones de salud mental, nos permite contemplar una serie de factores y diferencias institucionales que son fundamentales para elegir el tipo de actividades artísticas y dinámicas de trabajo adecuadas a esta población. El primer obstáculo se presenta en las restricciones que existen para poder ingresar a estos centros por el hecho de tratarse de una institución de seguridad. La dificultad para ingresar a realizar actividades y poder ingresar con cierto tipo de materiales y equipo de trabajo nos marca límites desde un principio.

Aunado a esto, las características de la población psiquiátrica también nos impone ciertos límites y posibilidades de trabajo; el uso de medicamentos -característica común en esta población- nos obliga a aplicar dinámicas de trabajo cortas ya que todas las participantes se encuentran bajo el efecto de fármacos, en algunas de ellas los efectos son evidentes en su comportamiento y algunas veces es prácticamente imposible realizar cualquier tipo de actividad; la falta de concentración, la depresión o la somnolencia, son algunos de los obstáculos que se presentan en el momento de trabajar en estas condiciones.

A pesar de estos obstáculos, nuestra experiencia de trabajo con lenguajes artísticos en este contexto ha sido positiva, incluso cuando las mujeres se encuentran en estas condiciones adversas han optado por permanecer en el taller e intentar realizar la actividad artística. Esto nos pone a reflexionar en torno a las características terapéuticas y de sanación innatas en los lenguajes artísticos; a pesar de que la mayor parte del grupo de mujeres con las que trabajamos no tenían demasiada experiencia artística, el 80% del grupo tuvo presencia constante y se mostró interesado por cada una de las actividades.

Las principales actividades artísticas con las que trabajamos fueron pintura, dibujo, modelado en barro, máscaras de yeso, cuento, teatro y musicoterapia. Cada actividad fue programada con base en un balance y diagnóstico previo, tomando en cuenta la experiencia y necesidad de cada una de ellas. Un 50% del grupo había tomado algunas clases de dibujo, pintura y manualidades con un maestro que acude semanalmente al centro. El resto no había tenido experiencia con ningún tipo de actividad artística.

Nuestra primera actividad se basó en técnicas de arte-terapia y musicoterapia, tuvo como objetivo promover en las participantes el trabajo grupal, la solidaridad mutua, el compartir e intervenir espacios. Mediante la elaboración de una pintura colectiva en donde las participantes utilizaron sus manos y dedos para plasmar con pintura dactilar la superficie blanca del papel, les incitamos a romper con el miedo al espacio vacío y transgredir los límites impuestos por el miedo al error y la frustración de la equivocación. Además, se promovió el apoyo, la solidaridad y el compañerismo en el momento de que las participantes tuvieron que intercambiar lugares y área de trabajo para intervenir el espacio pintado por las otras compañeras. Elegimos esta actividad para comenzar nuestro programa de talleres ya que nos facilita el reconocimiento del grupo y nos ayuda a darnos cuenta de la situación y las capacidades físicas y mentales de cada una de las participantes. La pintura dactilar ofrece la posibilidad de tener un contacto directo con material y posibilita el sentir la conexión entre el cuerpo, la materia y la expresión visual que se está procesando, además pintar con las manos brinda la confianza para transgredir el espacio vacío y perder la desconfianza (Foto 1).

Foto 1. Internas del dormitorio 8 del CEFERESO “Tepepan” realizando la primera etapa de la actividad de arte terapia; las participantes se colocan en cada extremo del papel, aplican la pintura con las manos y dedos para posteriormente cambiar de posiciones e intervenir el espacio previamente pintado por las compañeras. Actividad realizada el 19 de septiembre de 2014. Foto: Graciela Martínez.

Posteriormente a esta primera etapa de la actividad, se llevó a cabo la realización de una representación teatral por equipos, siguiendo la misma línea de trabajo, les instruimos para que eligieran a las integrantes, y se formaron tres equipos, posteriormente se organizaron para realizar la escritura y narración del cuento, seguido el ensayo y la representación del mismo. Además la realización de la escenografía y vestuario complementó el proceso artistico de esta etapa de la actividad (Foto 2).

Foto 2. Actividad de arte-terapia realizada en el dormitorio 8 del CEFERESO “Tepepan” el día 19 de septiembre del 2014. Las participantes formaron tres equipos para elaborar un breve cuento, elaborar el vestuario y la escenografía y posteriormente hacer la representación de la obra. En la imagen aparecen pintando Guadalupe y Claudia, dos de las integrantes del grupo “Alfa y Omega” y a su lado se encuentran dos integrantes del equipo “Ariscas”. Foto: Graciela Martínez.

Esta primera parte de nuestro programa de talleres nos permitió acercarnos y conocer a las participantes a partir del uso de los lenguajes artísticos y la participación colectiva. Una de nuestras aportaciones más importantes como facilitadores fue el hecho de estimularles a romper el miedo e inseguridad a expresarse creativamente: a pintar y manchar con los dedos y manos, a decir, escribir o actuar. Además, esta actividad nos dio la oportunidad de poder conocer un poco acerca de las relaciones de amistad y liderazgo que mantienen entre sí este grupo de mujeres que tienen la obligación de purgar una pena y la necesidad de compartir un espacio vital en común que las limita y las margina.

Sandra Luz, interna en el dormitorio 8 del CEFERESO “Tepepan”, fue una de las participantes más constantes a nuestras sesiones de actividades artísticas; en la imagen aparece mostrando parte del trabajo en equipo que realizó para la escenografía de la actividad de arte terapia realizada el 19 de septiembre de 2014. Foto: Graciela Martínez.

A partir de este primer ejercicio creativo, pudimos establecer un plan de trabajo acorde a las necesidades del grupo, como hemos señalado, prácticamente la mitad de las participantes no tenía experiencia en actividades artísticas, las que la tenían únicamente habían tenido contacto con algunas técnicas de dibujo y pintura. Esta circunstancia nos dio la pauta para brindarles otros medios y técnicas de experimentación creativa.

La segunda actividad de nuestro programa la enfocamos en que tuvieran una experiencia creativa tridimensional. Les instruimos el proceso de elaboración de máscaras con vendas de yeso; se conformaron parejas o grupos de máximo tres participantes; una integrante servía como modelo mientras la otra le colocaba las vendas de yeso mojadas sobre la superficie del rostro previamente protegida con vaselina.

Isabel y Sandra Luz, internas del dormitorio 8 del CEFERESO “Tepepan” realizando la primera etapa de la actividad de máscaras con vendas de yeso realizada el 10 de octubre del 2014; en esta actividad la mitad de las participantes del grupo se rehusaron a modelar, únicamente accedieron a colaborar en la realización de la máscara. Foto: Graciela Martínez.

Esta actividad exhibió el temor de muchas de las participantes a modelar y ser tocadas por otra persona; probablemente el miedo a la sensación de ser transgredidas por el material húmedo en el rostro y tener que estar en una posición sin moverse durante más de quince minutos. Esta aprensión se presentó en la mitad de las participantes, del grupo de aproximadamente veinte mujeres diez de ellas no aceptaron modelar, sin embargo colaboraron y cooperaron colectivamente en colocar las vendas de yeso y realizar la parte final de la actividad; ésta consistió en pintar y decorar las máscaras a partir de un ejercicio de relajación y reflexión interior en el que cada una de ellas iba a proyectar un sentimiento o emoción para posteriormente representarlo en la decoración de la máscara. Al final de la actividad muchas de ellas intercambiaron las máscaras o pidieron que otra de las compañeras la pintara en su lugar.

Internas del dormitorio 8 del CEFERESO “Tepepan” realizando máscaras con vendas de yeso; en la imagen aparece Claudia, una de las participantes más jóvenes, con asistencia regular a las actividades y una de las más participativas y productivas del grupo. Imagen tomada el 10 de octubre del 2014. Foto: Graciela Martínez.

Esta actividad se realizó paralelamente con la técnica de musicoterapia[6], método fundamental en todas las sesiones de la intervención y de manera particular en ésta. La característica de la actividad exige paciencia y concentración, por lo cual es necesaria una atmósfera de relajación y distensión que permita a las participantes realizar la actividad. Otro aspecto importante fue la participación que hubo, incluso algunas de las internas que nunca participaron en las actividades artísticas se acercaron para ver lo que hacíamos y de hecho una de ellas accedió a modelar para realizar su máscara. Esta situación fue particular ya que la mujer manifestaba no gustarse a sí misma, no obstante, accedió a modelar nos pidió que pintáramos la máscara representando fuego saliendo por debajo de la cara como si se estuviera quemando.

Máscara de interna del dormitorio 8 del CEFERESO “Tepepan”; la interna que modeló para esta máscara no participó en ninguna de las actividades que realizamos durante nuestro trabajo de intervención; únicamente accedió a modelar para la realización de esta actividad y nos pidió que le pintáramos la máscara con la representación del fuego quemándola. Imagen tomada el 30 de octubre del 2014. Foto: Graciela Martínez.

Internas del dormitorio 8 del CEFERESO “Tepepan” mostrando el resultado del trabajo realizado en la primera etapa de la actividad de realización de máscaras de yeso el día 5 de octubre del 2014. Foto: Graciela Martínez.

Por otra parte, esta actividad también nos mostró el potencial que tienen algunas actividades artísticas para estimular a las personas y provocar a que accedan a formar parte de procesos creativos y artísticos, incluso únicamente como espectadoras. El acercamiento que se produjo en el desarrollo de estas actividades nos permitió conocer más de las mujeres y de los procesos de interacción que se presentan en su cotidianidad. El acceso a actividades y experiencias artísticas abrió la posibilidad de cambiar las rutinas y las formas de comunicación entre las mujeres internas en este dormitorio 8.

Estrella, interna del dormitorio 8 del CEFERESO “Tepepan” fue una de las participantes más constantes y con mejor desempeño en nuestras sesiones de actividades artísticas, sin embargo, fue cambiada de dormitorio y no asistió a las últimas actividades; en la imagen aparece mostrando el resultado del trabajo realizado en la primera etapa de la actividad de realización de máscaras de yeso el día 5 de octubre del 2014. Foto: Graciela Martínez.

BIBLIOGRAFÍA

ADATO Green, Victoria, La situación actual de las mujeres en reclusión, Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM.

AZAOLA, Elena y Yacamán, Cristina, Las mujeres olvidadas, CNDH-COLMEX, México 1996.

MORENO Morán, Rocío, Mujeres reclusas: una aproximación tanatológica (tesina), Asociación Mexicana de Tanatología, A.C. México 2014.

 

[1] El Centro Femenil ubicado en Tepepan fue inaugurado en 1982, cuando recibió a la población proveniente de la antigua Cárcel de Mujeres ubicada en Santa Marta. Hoy en día alberga solamente internas que ya han recibido y se encuentran cumpliendo una sentencia.

[2] AZAOLA, Elena y Yacamán, Cristina, Las mujeres olvidadas, CNDH-COLMEX, México 1996, pág 36.

[3] MORENO Morán, Rocío, Mujeres reclusas: una aproximación tanatológica (tesina), Asociación Mexicana de Tanatología, A.C. México 2014, pág. 8

[4] ADATO Green, Victoria, La situación actual de las mujeres en reclusión, Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM pág. 336.

[5] En un informe elaborado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos en 2013, se destaca una marcada discriminación en cuanto a género, señalando que la estructura de las cárceles, la normativa y la operación de estos centros está definida en función de los varones (CNDH, 2013, p.27).

[6] “La musicoterapia es el empleo de la música para alcanzar objetivos terapéuticos: la recuperación, conservación y mejoría de la salud mental y física”