POR LIC. NICOLÁS CARVALHO
No un lugar de paso, prótesis de proyectos personales, sino lugar de identidad y proyecto colectivo. Campo configurado desde el paradigma de la Salud Mental, en el que la Docencia, Investigación y Extensión, siempre con criterios de excelencia, dejen una marca en quienes la habitan y transitan. A ambos lados del escritorio y del pupitre y siempre mirando afuera. El afuera del campo es otro campo que también reclama proyecto: comunidad, pueblo y nación. Tenemos mucho para decir adentro para adentro y adentro para afuera y también tenemos mucho para dejarnos decir, acaso escuchar y siempre considerar desde afuera hacia adentro.
Decir que el marco teórico debe ser amplio hasta el infinito es redundante para una disciplina amplia hasta el infinito. Si el abrazo es igualmente amplio, puede alojar a los discursos científicos y académicos sin dejar de lado las cuestiones asociadas a la práctica o al ejercicio profesional inscripto en otros ámbitos, e incluso sostener las tensiones en los límites que las interpretaciones abusivas de estas orientaciones propenden.
Este proyecto que es un lugar y es un campo de límites dinámicos debe ser también nuestro. Nuestro de cada une de nosotres y de la subjetividad que nos atraviese o sostenga nuestra intención en cada momento del devenir institucional. Mirar al costado con amor, tensión, enfrentamiento o vocación, pero mirar.
La apuesta es compartida. La invitación se multiplica. Desde las madres y los padres fundadores a una nueva generación de psicólogues que hacen consistir, pero también deshacen los discursos heredados, los mandatos y proyectos. Que honran a quienes iniciaron este camino consolidando su impronta, su estilo, la inscripción o adscripción a tal o cual paradigma. Hasta les colegas que se embarcan en nuevos desafíos y encrucijadas, poniendo en crisis los mismísimos límites de la disciplina, las paredes de la Academia o el perfil del ejercicio profesional.
Mucho por decir incluso a riesgo de caer en la jerga con la que muchas veces por querer ser, nos estigmatizamos.
Hacer de nuestra facultad un lugar, un proyecto, una referencia y un nodo en el complejo entramado de relaciones de poder que configura el extenso campo de la Salud Mental. Crear. Hacer. Poiesis.