Nos vamos formando según las creencias culturales en las que estamos inmersas, mismas que dictan nuestro valor según las expectativas sociales al condicionarnos a través de sus normas para poder nombrarnos como mujeres.
Hay muchas prácticas que nacen de estas normas, que se relacionan entre sí como lo son el abuso, violencia, la maternidad, la afectividad y sensibilidad, pasividad, cosificación sexual y estándares de belleza, entre otras más. Las cuales realizamos todo el tiempo, todo el día sin saber de dónde vienen y por qué nos tocan. Han sido naturalizadas al ponerlas como lo real, lo natural en una mujer y al ser parte de nuestro lenguaje diario, desde la dialéctica, nombrarlo impacta lo suficiente para que en nuestra realidad la opresión pase desapercibida.
Cuestionemos la cosificación de la cuerpa que habitamos, esta manera de estar en el mundo normalizada que se trae consigo silencios, peso, emociones, indiferencia y muerte.
Reconozcamos nuestra agencia dentro de la realidad e intencionémosla; destejemos las formas opresivas que hemos reproducido por cientos de años desde el cuestionamiento, desaprendizaje, voluntad, apertura, acción.
Somos Arantxa, Daniela y Camila. Psicólogas en proceso, morras y mujeres mexicanas compartiendo un pedacito de la realidad de ser mujer en nuestro país desde nuestro acto de resistencia por y para nosotras.
Realizamos este video con el fin de crear un espacio de politización hacia la vivencia y cosificación de las mujeres mexicanas, esto al permitirnos externar pedazos de nuestra historia y escuchar otras en otras vidas. Compartirlo desde el sentimiento, emoción y ganas de continuar cuestionando y abriéndonos posibilidades al cambio.
Queremos formar parte para dar, darles y darnos voz desde distintos espacios.